LA LEY DEL DHARMA

¿QUÉ ES TU PROPÓSITO O MISIÓN DE VIDA?

Dharma es una palabra escrita en sánscrito que significa propósito de vida.

El propósito o misión de vida es aquello con lo que te sientes realizada creando abundancia infinita en todos los aspectos de tu vida. Es para lo que viniste hacer aquí, es tu razón de existir.

Deepak Chopra en su libro “Las 7 leyes espirituales del éxito” nos habla de la ley del Dharma. Dicha ley dice que nos hemos manifestado en forma física, con cuerpo físico, para cumplir con nuestro propósito.

Según esta ley, cada ser tiene un talento único y una forma única de expresarlo. Existe algo que cada uno de nosotros puede hacer mejor que el resto de la humanidad; y que para cada talento único y para cada expresión única existen también unas necesidades únicas.

Cuando esas necesidades únicas corresponden a la expresión de la creación de nuestro talento único, es lo que hace que se forme la chispa que nos lleve a la abundancia. La expresión de nuestro talento único crea riqueza y abundancia ilimitada.

Si esta ley nos la hubiesen enseñado en el cole tendríamos una vida plena y abundante. Pero como bien sabes, hemos venido, elegido, planeado unas experiencias, familia, relaciones, trabajo y todo lo que ahora mismo estamos viviendo, desde antes de nacer.

Así que sabiendo que esta ley debe cumplirse, como las leyes universales, son leyes exactas y nunca fallan. Por tanto, vamos a ponerla en marcha e implantarla a nuestras vidas.

Chopra nos dice que esta ley tiene tres componentes:

El primero dice que cada uno de nosotros estamos aquí para descubrir nuestro Yo Superior o Yo Espiritual. Debemos descubrir por nuestra cuenta que dentro de nosotros se encierra un dios o una diosa creador/a.

El segundo dice que todos tenemos un don o talento único y su expresión. Que solo tú tienes ese don tan peculiar o esa expresión de ese talento, que no existe otro ser con el mismo talento o expresión de ese talento.

El tercero dice que tenemos que poner ese talento al servicio de la humanidad: servir al prójimo y preguntarnos: “¿Cómo puedo ayudar a todos aquellos con los que entro en contacto?”

Si sumamos los tres componentes no hay nada que frene la entrada a la abundancia ilimitada.

Si te preguntas: “¿Qué gano yo con todo esto?” Esta pregunta no proviene de tu Yo Superior ni de tu alma, esta pregunta proviene del ego. Si preguntas: “¿Cómo puedo yo ayudar?” Esta pregunta proviene del espíritu, de esa conexión con tu Yo Superior. Y el Espíritu es lo que lleva a nuestra conciencia elevarse al siguiente nivel.

Tan sólo con cambiar el diálogo interno, cambiando las preguntas estás dejando entrar la conciencia del espíritu. Además de practicar la mediación es algo tan simple como cambiar el diálogo que te haces interiormente.

“Cuando un guerrero aprende a detener el diálogo interno, todo es posible; los más rebuscados planes están al alcance de la mano”. Carlos Castañeda.

Pero evidentemente, si quieres completar tu propósito y llevar a cabo la Ley del Dharma debes comprometerte a buscar tu Yo Superior, que está más allá de tu ego, llevándolo a la práctica espiritual. También debes comprometerte a encontrar tu don o talento único, disfrutando del proceso, porque es así como entras en el conocimiento intemporal, el conocimiento de tu alma respecto a ese talento. Y otro compromiso que debes llevar a cabo es preguntarte a ti mismo como puedes ayudar a la humanidad. Cuando tengas la respuesta deberás ponerla a la práctica, tomando acción, aplicando tus talentos para servir las necesidades de los demás.

¿Me sigues?

Fácil ¿verdad?

Vamos a ponerlo en práctica…

Coge un papel y haz una lista de estas dos preguntas:

• Suponiendo que no tuvieras ningún problema de dinero y que dispusieras de todo el tiempo y el dinero del mundo, ¿qué harías? …………………………………………………………………………………… ……………………………………………………………………………………
• ¿Harías lo mismo que estás haciendo en este momento?…………………….

Si has contestado que sí estás en el Dharma, en tu propósito. Y si es así podrías pasar a la siguiente pregunta:

• ¿Cómo puedo ayudar a la humanidad? …………………………………………………………………………………… ……………………………………………………………………………………

No te preocupes si no te sale nada, sólo anota lo primero que te venga a la cabeza. Y si tu respuesta anterior fue No, tampoco debes tomarlo como algo negativo. La mayoría de las personas no están en el Dharma y es por eso que no encuentran sentido a su vida.

Verás como con la práctica consciente de la meditación, conexión, comunicación y acción te llevarán a tener los resultados que deseas.

Empezarás a ver tu vida como una expresión milagrosa todo el tiempo y a sentir la verdadera alegría y felicidad plena que te mereces. Conocerás el verdadero significado del éxito, que no es más que el éxtasis de alegría y la elevación de tu propio espíritu.

Todos los seres de este planeta tenemos una misión aquí, vinimos a eso. Incluso los animales, insectos o todo tipo de especies de fauna y flora. Todo ser vivo tiene una misión.

“Tenemos algo en común, y ese algo en común es nuestra misión en la vida. Seguramente una misión del bien, una misión de la cultura de la vida, y no una misión de la guerra”. Rigoberta Menchú.

Leyendo un artículo sobre las hormigas he descubierto que ellas, hace miles de años, inventaron la agricultura. Aunque el ser humano se haya atribuido ese descubrimiento en realidad fueron las hormigas quienes lo hicieron.

Según un estudio publicado en Proceedings of the National Academy of Sciences, las hormigas han estado cultivando hongos desde hace unos 60 millones de años. Y además de ello, a raíz del riesgo que conlleva este cultivo desarrollando parásitos que podían extinguir las colonias de hormigas, algunas de ellas llevan una especie de “traje” que les protegen de esos parásitos, formando un fantástico antibiótico natural.

Como ves, las hormigas tienen una misión importante pero además de dicha misión tienen diferentes funciones dentro de la colonia.

Las hormigas dividen el trabajo entre dos grupos principales: las hormigas reinas, responsables de la reproducción, y las obreras, que suponen la mayoría de la población de una colonia.

Cada una de ellas tiene una misión y un talento único, además de una forma de expresarlo única. Cada una de ellas hace su labor de manera única y siempre existe una necesidad única que requiere dicha labor única.

Igual que las hormigas, los humanos tenemos una función específica para servir al prójimo.

Sin duda es una labor que debes hacer porque ¡para ello viniste!

Que tengas un excelente día.

Nuria Sala.